En sí, el olor de las cobayas no es desagradable.
En cambio, la jaula o la conejera pueden oler francamente mal. Incluso poco después de una limpieza completa, el olor a excrementos suele volver a extenderse.
En este artículo te explicamos qué puedes hacer con el olor a cobaya o conejera.
La jaula del tamaño adecuado
Las cobayas son animales sociales que deben criarse al menos en parejas.
Debes prever al menos dos metros cuadrados de superficie para dos animales, de modo que puedan corretear si es necesario.
Por desgracia, muchos modelos comerciales son demasiado pequeños.
Esto no sólo significa que no se mantienen de forma adecuada para la especie. Además, la orina y las heces se acumulan en mayor concentración. El calor corporal de los animales provoca la fermentación de las heces, que a su vez desprenden un fuerte olor y pueden incluso atraer insectos.
Además, las cobayas pueden volverse más susceptibles a las enfermedades.
Una gran superficie puede evitarlo y es buena para los animales. Sin embargo, esto por sí solo no basta para evitar los malos olores.
Insertar retretes
No a todas las cobayas les gusta utilizar los rincones con retrete, pero a algunas sí.
Si se utilizan cuencos extraíbles o bandejas pequeñas y bajas, pueden retirarse fácilmente y limpiarse todos los días. Así se ahorra arena y esfuerzo. También evita que se formen olores desagradables.
Por ejemplo, son adecuados los inodoros para gatitos o las bandejas de material de oficina. Son baratos, fáciles de limpiar y bajos. Las bandejas higiénicas normales también pueden utilizarse en conejeras más grandes.
Elegir el lecho adecuado
Uno de los factores más decisivos en la aparición de olores es la capacidad de absorción del lecho.
El lecho de espelta, el heno y la paja, por ejemplo, no absorben la orina o apenas lo hacen. En su lugar, el líquido cae directamente al suelo y empieza a oler. Dependiendo del tamaño de la conejera y del número de animales, puede reaparecer un fuerte olor tan sólo una hora después de la limpieza.
Las virutas de madera normales son mejores.
También las hay aromatizadas, con olor a limón fresco, por ejemplo. Son muy absorbentes y muy baratas.
El heno y la paja se colocan mejor en estanterías dentro de estanterías. Así se evita que se contaminen con heces.
También puedes probar con bolitas absorbentes o arena de madera para gatos para los retretes de tus cobayas y el suelo de la jaula. Actúan como una esponja y absorben la orina.
Altura de la arena
Muchos propietarios de cobayas cometen el error de colocar el lecho demasiado bajo. Sin embargo, cuanto menos lecho hay, más rápido se desarrollan los olores. Además, los animales se sientan en un suelo húmedo, lo que puede provocar problemas de salud.
Por lo tanto, mantenga el lecho a una altura mínima de cinco a diez centímetros. Esto proporciona una capacidad mucho mayor para que el líquido pueda esparcirse mejor. También tendrá que limpiar la conejera o la jaula con menos frecuencia.
Consejo: Si temes que tus cobayas arañen el lecho o que salga volando de la jaula cuando corran y jueguen, puedes colocar paneles de plexiglás desde el exterior.
Limpieza regular de la jaula de la cobaya
Para evitar el olor de las cobayas la clave está en limpiar el alojamiento de tus cobayas de forma regular y adecuada. Los lechos viejos y, sobre todo, húmedos pueden enmohecerse, fermentar y descomponerse. Entonces, el olor no sólo procede de los excrementos, sino también de los procesos que se producen durante la descomposición.
Dependiendo del tamaño de la jaula y del número de animales, el lecho debe cambiarse una vez a la semana. Con muchas cobayas y jaulas pequeñas, puede ser necesario hacerlo con más frecuencia. En cambio, para alojamientos muy grandes y pocos animales, los intervalos pueden ser más largos. Los rincones más frecuentados de los aseos y la zona bajo la caseta de dormir deben limpiarse con más frecuencia.
Sin embargo, también se pueden cometer errores al limpiar y no eliminar todas las fuentes de olor.
Por ello, es importante seguir el siguiente procedimiento
- Retire toda la ropa de cama.
- Limpiar las cazoletas, los inodoros y los bebederos.
- Limpiar la bandeja del suelo.
- Limpiar los dormitorios, las rejillas y los juguetes.
Sólo cuando todo esté seco de nuevo se puede añadir lecho fresco. La limpieza a fondo de todos los componentes elimina el olor en la medida de lo posible.
Utilice productos de limpieza adecuados
Para evitar el olor de las cobayas, se necesitan los productos de limpieza adecuados para destruir los excrementos y las bacterias responsables del olor.
Al mismo tiempo, no deben ser peligrosos para tus cobayas. Por eso son adecuados los limpiadores enzimáticos aptos para animales de las tiendas de animales.
Pulverizar o remojar brevemente con el producto de limpieza puede prolongar la vida útil del suelo o la bandeja del suelo y difundir un olor fresco.
Elija el material adecuado para la bandeja
Las bandejas de plástico son ideales.
Son fáciles de limpiar y no absorben los olores tan rápidamente como una conejera con suelo de madera. A largo plazo, sin embargo, también se rayan y pueden empezar a oler. Por lo tanto, es inevitable cambiarlas con regularidad.
Eliminar el pienso fresco
Otra posible fuente de olores es la comida fresca, que puede estropearse rápidamente o incluso empezar a enmohecerse, sobre todo en verano.
Si se «pierde» en la yacija, no sólo puede apestar, sino también suponer un riesgo para la salud de sus animales.
Por lo tanto, asegúrese de retirar todos los restos de forma rápida y minuciosa. Lo que haya acabado en el comedero por la mañana debe retirarse como muy tarde por la noche. Si las sobras son frecuentes, hay que reducir la cantidad y ofrecer comidas más frecuentes si es necesario.
Cambiar el equipamiento
Las casitas, los juguetes y las escaleras de madera absorben los malos olores con relativa rapidez.
Se apoyan o descansan sobre la cama y, por tanto, absorben la orina, por ejemplo.
Si las medidas anteriores no le funcionan y la jaula sigue oliendo mal incluso después de limpiarla, para evitar el olor de las cobayas, debería revisar el mobiliario y cambiarlo si es necesario.
¿Lo ha intentado todo y sigue notando un olor extraño? Entonces consulte a un veterinario. Porque el olor inusual de la orina también puede deberse a diversos problemas de salud.