¿Los conejos con orejas caídas oyen peor?

Las cucharas erguidas de un conejo cumplen la función de un gran embudo sonoro y ayudan a los animales a percibir incluso los sonidos más pequeños.

Entonces, ¿los conejos con orejas caídas oyen peor?

Te lo contamos en este artículo

¿Los conejos con orejas caídas oyen peor?

Sí, los conejos con orejas caídas oyen bastante peor. Pero no sólo eso. También tienen un mayor riesgo de sordera, infecciones de oído y problemas dentales. Por lo tanto, es de esperar que sufran restricciones y dolor.

Cambios en la forma del cráneo como factor desencadenante

Para que los conejos tengan orejas caídas, se seleccionaron específicamente para la cría animales con una forma de cráneo alterada. Sin embargo, esta forma da lugar a varios problemas potenciales.

Por ejemplo

  • movilidad limitada
  • canales auditivos estrechos
  • capacidad auditiva reducida
  • Dientes desalineados

Movilidad limitada de las orejas

Los conejos con orejas caídas tienen una movilidad limitada en la zona de las orejas.

Por un lado, esto significa que son incapaces de erguir y girar las orejas. Por lo tanto, les resulta mucho más difícil reconocer el origen de un sonido y orientarse.

Por otra parte, la forma de la oreja hace que el tejido y el pelo se sitúen sobre el conducto auditivo. Por tanto, la audición es limitada.

La movilidad reducida de las orejas caídas tiene otra desventaja: como el lenguaje corporal de los conejos también se extiende a la postura de sus orejas, los animales con orejas caídas pueden ser malinterpretados por sus congéneres.

Si están asustados o sumisos, por ejemplo, no pueden tirar de las orejas hacia atrás y echarlas hacia atrás. Esto, a su vez, puede provocar conflictos dentro de un grupo o pareja.

Canales auditivos estrechos

Las orejas caídas de su conejo no sólo reducen la penetración de las ondas sonoras y el control muscular. La forma alterada del cráneo y las orejas caídas tienen también otras consecuencias negativas. Esto se debe a que los canales auditivos o conductos auditivos se estrechan con frecuencia.

Esto puede dar lugar a una peor audición.

También es posible que el cerumen no pueda drenar lo suficiente y ser transportado al exterior. Esto estrecha aún más los conductos y dificulta la audición de los sonidos.

También es necesaria una limpieza regular y aumenta el riesgo de infección.

Estas infecciones son muy dolorosas, por lo que conviene revisar con frecuencia los oídos del conejo y, en caso necesario, consultar pronto al veterinario. También puede enseñarle a limpiarlas, enjuagar las orejas o recetarle una solución adecuada para ablandar y eliminar la suciedad.

Audición reducida

Se han realizado pocos estudios específicos sobre la capacidad auditiva de los conejos con orejas caídas.

Sin embargo, los estudios existentes muestran que los animales suelen tener una audición más deficiente o incluso parecer sordos.

Como parte de un estudio del Royal Veterinary College de Hatfield, se compararon 15 representantes de razas con orejas caídas con 15 animales con orejas erectas. El resultado: además del mayor riesgo de lesiones, las largas orejas caídas provocaban a menudo enfermedades dolorosas y crónicas de los órganos auditivos.

Sin embargo, no está claro si estos problemas son congénitos, están causados por infecciones no detectadas o son el resultado de una obstrucción del conducto auditivo.

Además, el número de animales es comparativamente pequeño, por lo que no se dispone de resultados concluyentes.

Sin embargo, se puede reconocer una tendencia clara

Dientes mal colocados

La forma alterada del cráneo en los conejos de orejas caídas no sólo afecta a las orejas y al tamaño de los canales auditivos.

También afecta a la mandíbula.

Esto puede provocar dificultades a la hora de comer, ya que los dientes a menudo no se desgastan lo suficiente o de manera uniforme, por lo que pueden tener bordes y puntas afiladas o ser demasiado largos. La ingesta de alimentos se hace más difícil, el veterinario puede acortar los dientes y es posible que se produzcan lesiones en las encías o la mandíbula y la consiguiente inflamación.

Incluso los huesos de la mandíbula pueden verse afectados. Además, las infecciones pueden extenderse a la zona de los ojos, provocar hinchazón de la cara y causar un dolor considerable.

Por lo tanto, al elegir una raza con orejas caídas, también debe revisar los dientes con frecuencia o hacer que se los revisen para reconocer estos problemas en una fase temprana e iniciar el tratamiento.

Orejas caídas y razas extremas: ¿qué hay que tener en cuenta?

Las orejas caídas no se dan en conejos que viven en libertad.

Se trata de razas especiales que tienen una desventaja considerable en comparación con los animales de orejas erectas. Los roedores carecen de la alerta temprana de peligro inminente. Además, requieren muchos más cuidados y son más susceptibles a las infecciones y el dolor.

Si, a pesar de todo, decide tener un conejo con orejas caídas o ya lo ha decidido, debe realizar controles más frecuentes y acostumbrar a su mascota a ellas lo antes posible.

Esto reducirá el estrés y facilitará la detección precoz de problemas.

Tenga en cuenta también que las razas extremas, como los carneros con orejas muy largas, pueden incluso pisarlas y lesionarse más fácilmente. Los conductos auditivos también están peor ventilados.

Este factor también puede contribuir a que las infecciones sean más frecuentes. Por lo tanto, es mejor revisarlas a diario.

En caso de enrojecimiento, hinchazón, suciedad, secreción o mal olor del oído, consulte inmediatamente a un veterinario. Si su mascota se rasca las orejas de forma llamativa o sacude la cabeza con frecuencia, esto también puede indicar un problema en el interior de los oídos.

 

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