Losconejos y los hámsters son dos de los animales de compañía más populares en los países de habla alemana.
El problema es que muchos amantes de los animales no se deciden por uno u otro.
¿Por qué no comprar un conejo Y un hámster y tener los dos animales juntos? Pero, ¿es posible? ¿Se sentirían cómodos en la misma jaula?
Ya tenemos la respuesta
¿Pueden vivir juntos los hámsters y los conejos?
Los conejos y los hámsters no deben convivir debido a sus diferentes cuidados, rasgos de carácter y necesidades alimentarias.
Aunque podrían llevarse bien, no se recomienda una jaula compartida debido a sus estilos de vida y comunicación.
Consideración preliminar: ¿Por qué podrían convivir conejos y hámsters?
Ambos necesitan una jaula o un hogar con lecho absorbente y en el que puedan escarbar.
También parece sensato en un principio, ya que ninguno de los animales tiene que estar solo, pero no pueden reproducirse entre sí sin esterilización.
Si no hay espacio suficiente, pero se quiere mantener juntas a ambas especies, una jaula compartida puede parecer una solución adecuada.
Las jaulas compartidas también pueden parecer una buena solución si muere otro conejo o si ingresa inesperadamente un animal más.
Sin embargo, no es el caso.
Por eso NO se debe tener juntos a conejos y hámsters
El carácter
Por un lado, el carácter de los conejos y los hámsters es similar: ambos defienden su territorio frente a otros y, por tanto, también protegen sus recursos.
Sin embargo, el factor decisivo es que los conejos son muy sociables.
Pueden vivir en grandes grupos, llevarse bien entre ellos, mimarse y jugar, acicalarse, dormir en contacto y comunicarse entre sí.
No ocurre lo mismo con los hámsters.
Salvo en la época de celo, son animales solitarios.
Una vez alcanzada la madurez reproductiva, dejan de jugar entre ellos y requieren un mayor distanciamiento individual.
Las excepciones son los hámsters enanos, que pueden mantenerse juntos con espacio suficiente y zonas separadas para comer y beber. Pero incluso en ese caso, hay que contar con que se reproduzcan de forma indeseable o con que surjan conflictos y se produzcan lesiones graves.
Los conejos crean vínculos duraderos, mientras que los hámsters sólo quieren relacionarse de vez en cuando.
Aquí confluyen caracteres muy diferentes.
La diferencia de tamaño
Los conejos y los hámsters tienen tamaños y pesos muy diferentes. Por tanto, existe un riesgo considerable de lesiones para el hámster más pequeño.
El conejo no tiene por qué tener ninguna intención maliciosa. Basta un paso en falso o un salto para romper huesos o causar heridas superficiales.
No hay que subestimar esta gran diferencia por sí sola. Esto se debe a que el hámster está constantemente expuesto a una situación de estrés por parte del conejo, ya que supone una amenaza e incluso un peligro para su vida.
Sin embargo, los conejos también corren el riesgo de sufrir lesiones: A pesar de su pequeño tamaño, los hámsters tienen gran poder de mordedura y afilados dientes para roer.
Por otra parte, los conejos tienen una piel muy sensible y delicada.
Un mordisco de un hámster basta, por tanto, para causar heridas purulentas e inflamaciones graves, que pueden incluso provocar la muerte.
Actividad
Los hámsters son activos sobre todo al atardecer o por la noche.
Esto significa que pueden perturbar el sueño del conejo, que quiere descansar por la noche. Lo contrario también es cierto. Si el conejo está activo durante el día, molesta al hámster.
Ambos animales están expuestos a un estrés considerable.
Esto tiene un efecto negativo en el comportamiento.
Los individuos se vuelven más irritables y reaccionan agresivamente con mayor rapidez. La convivencia, pero también su salud, se ven afectadas.
La alimentación
Aunque tanto los hámsters como los conejos son roedores, tienen necesidades alimentarias diferentes.
Mientras que los hámsters también necesitan alimentos ricos en proteínas de origen animal, esto no es adecuado para los conejos. La dieta más calórica y grasa de los hámsters tampoco es adecuada para los conejos.
La comida para conejos tampoco sería saludable para un hámster.
El problema de mantenerlos en un espacio muy limitado es que hay que proporcionar comida a ambos animales en todo momento. De lo contrario, pueden aparecer problemas digestivos en poco tiempo.
Sin embargo, la separación total no es posible.
El hámster siempre tendrá acceso a la comida del conejo. El conejo también puede servirse de la comida del hámster.
Esto, a su vez, provoca estrés en ambos animales. Esto se debe a que son recursos que quieren defender.
La actividad
Mientras que los hámsters ya son felices con una rueda para correr y un entorno variado, los conejos deben tener libertad diaria.
Un hámster también puede hacer mucho ejercicio en una rueda de correr o a través de tubos debido a su menor tamaño. Esto no es posible para un conejo en una conejera o jaula.
Aunque ambas especies pueden dividirse en varios niveles, los conejos están más limitados por su tamaño.
Los hámsters son más pequeños, más ágiles y, por tanto, pueden encajar en huecos o nichos que un conejo no puede alcanzar o utilizar como vía de escape. Por lo tanto, la protección debe estar muy bien pensada. Esto se aplica tanto a la jaula como al corral.
Por tanto, el esfuerzo para usted es mayor. Los riesgos para sus animales son mayores. Porque para hacer justicia a ambos, hay que proceder de forma muy diferente. Esto no es posible en una jaula o cuando los animales están juntos en libertad.
El equipamiento necesario
Los hámsters necesitan un sustrato en el que puedan excavar y construir un nido.
Los conejos también escarban, pero no pueden hacerlo en una jaula normal. Sólo construyen un nido cuando esperan crías o están aparentemente embarazadas.
Los hámsters pueden trepar, los conejos normalmente no.
Por lo tanto, es casi imposible separar las zonas de dormir y los juegos de alimentación entre sí de forma sensata y adaptarlos a las respectivas especies animales.
Nuestra recomendación
Debido a las considerables diferencias entre las dos especies animales, mantenerlos juntos en una jaula no es ni sensato ni seguro. Los conejos y los hámsters no se benefician de estar juntos.
Por lo tanto, es mejor tener dos alojamientos separados que no estén demasiado cerca el uno del otro.
Lo ideal son dos habitaciones distintas. Esto se debe a que los ruidos provocados por los diferentes tiempos de actividad también pueden ser percibidos como molestos por los animales.
Decídase por una especie o cree un entorno adecuado para cada una.