El mal aliento en los conejos suele indicar problemas en los dientes y las encías. Los problemas digestivos también pueden ser responsables.
En cualquier caso, es necesario un examen, ya que el mal aliento no es normal en los animales.
En este artículo, te revelamos las posibles causas y también te decimos qué puedes hacer con el mal aliento de tu conejo.
Vamos allá
Mal aliento en conejos: Primeros pasos
Si su conejo tiene un mal aliento notable, esto es definitivamente una causa de preocupación. Esto se debe a que siempre es el resultado de una enfermedad, lesión u otro problema.
Para poder aplicar el tratamiento correcto, primero hay que conocer la causa.
Averiguarla no siempre es fácil y siempre debe hacerlo rápidamente un veterinario.
Usted puede ayudarle con la anamnesis y el diagnóstico si observa atentamente a su conejo y le proporciona información importante. Esto incluye las respuestas a las siguientes preguntas
- ¿Cuál es la composición de la comida?
- ¿Comprueba regularmente sus encías y dientes?
- ¿Come y bebe sin problemas?
- ¿Sus heces son normales?
- ¿El animal es propenso a las flatulencias o ha tenido recientemente el estómago duro?
- ¿Hay o ha habido mucha salivación?
Todos estos factores pueden ser pistas decisivas y acelerar la búsqueda del desencadenante.
Puede informarse sobre las posibles causas en el capítulo siguiente.
Las causas más comunes del mal aliento
#nº 1: Residuos de comida
Los restos de comida que se quedan en la boca se estropean y fermentan. Esto puede provocar un olor desagradable.
El riesgo de que esto ocurra es mayor si hay algún problema en los dientes. Por ejemplo, grietas en la sustancia dental o puntos debidos a un desgaste desigual.
Los dientes demasiado largos también pueden dificultar el roer y masticar, haciendo que su mascota recoja trozos más grandes que pueden quedar atascados entre los dientes o las mandíbulas.
Las desalineaciones y las lesiones tras una caída o pelea también son posibles causas.
Contramedidas
El tratamiento en este caso es muy sencillo siempre que se realice a tiempo: Basta con retirar el alimento.
Después puede ser necesario corregir la desalineación o la longitud de los dientes ungueales. Esto suele requerir una intervención quirúrgica.
#2: Inflamación
El tejido inflamado, las raíces dentales supuradas y los abscesos también pueden producir un olor desagradable. Esto es causado por bacterias que conducen a la descomposición del tejido y la formación de pus.
Esto puede hacer que la boca de su conejo huela a caries o a un desagradable olor dulce.
Al igual que ocurre con los daños en los dientes, es típico que comer y beber resulte difícil y limitado o ya no sea posible. Su conejo también puede rechinar los dientes porque sufre dolor debido a la inflamación.
Las raíces inflamadas no suelen reconocerse, pero las infecciones se caracterizan por enrojecimiento, hinchazón y posible formación de pus visible. También es posible que aumente la salivación.
Contramedidas
El tratamiento suele consistir en la administración de antibióticos.
Además, puede ser necesario extraer un diente y, en caso necesario, ofrecer sólo comida blanda durante un breve periodo de tiempo o incluso alimentar al conejo con papilla para evitar una pérdida de peso excesiva.
#3: Alimentos fermentados
Los alimentos muy fermentados o flatulentos hacen que se produzcan más gases en el estómago y los intestinos. Esto puede tener un efecto negativo en el tracto digestivo.
Además de hinchazón, calambres y dolor, el gas también puede aumentar y causar mal aliento en su conejo.
Un vientre hinchado y duro es un signo típico de problemas digestivos. También pueden producirse gorgoteos o gruñidos.
La diarrea también es posible.
Contramedidas
La mejor prevención es una dieta equilibrada y adaptada, en la que sólo se introduzcan nuevos alimentos gradualmente y se prueben en pequeñas cantidades al principio. El tratamiento puede incluir la administración de aceites esenciales para calmar la digestión.
#4: Diabetes
El mal aliento es especialmente notable y fuerte en la diabetes.
La diabetes puede hacer que el aliento huela a fruta o a acetona si los niveles en sangre son extremos. El olor puede recordar a fruta demasiado madura, sustancias químicas o alcohol de alta graduación, por ejemplo.
En cualquier caso, se trata de una situación peligrosa. Porque si se produce mal aliento con diabetes, indica hiperglucemia o hipoglucemia graves.
Contramedidas
Por regla general, su conejo también se mostrará apático e incluso puede caer en coma. Por ello, llévelo inmediatamente al veterinario o a una clínica veterinaria.
Igualando y ajustando los niveles de insulina y azúcar y, a continuación, ajustando la medicación, pueden evitarse consecuencias peores.
Consejos probados para la prevención
Prevenir los posibles desencadenantes del mal aliento en los conejos es mejor que tratarlos. Esto incluye varios factores, como la alimentación y los controles.
#nº 1: Preste atención a la dieta
Su mascota debe disponer siempre de heno para rechinar los dientes.
También debe evitar los alimentos muy azucarados o ricos en almidón u ofrecerlos sólo en cantidades muy pequeñas. El pan seco y la fruta dulce no deben estar en el menú todos los días.
Es mejor ofrecérselos sólo de vez en cuando y en pequeñas cantidades como recompensa
Evita los cambios bruscos y nunca le des demasiados alimentos nuevos a la vez. Si sigue estas normas y además comprueba que no hay plantas venenosas y otros peligros potenciales en el corral, evitará muchos problemas.
#nº 2: Realice controles periódicos
Lo mejor es examinar a su conejo todos los días y mirar también en su boca.
Cualquier daño en los dientes, lesión o inflamación se notará inmediatamente. Esto permite un tratamiento precoz, aumenta las posibilidades de éxito de la terapia y la simplifica.
Además, también notará más rápidamente los trastornos digestivos y otros cambios.
¿Su conejo ha perdido recientemente el apetito, bebe mucho y ha perdido peso? Estos síntomas indican diabetes y requieren tratamiento veterinario inmediato.
#nº 3: Evite las caídas
Las caídas pueden provocar lesiones que inicialmente pasan desapercibidas.
Si éstas se producen en la zona de la boca, pueden afectar a huesos y mucosas. También es posible que se produzcan contusiones y hemorragias internas.
Por tanto, hay que hacer que el hogar y el corral exterior del conejo sean seguros y evitar grandes diferencias de altura. Asegúrese también de transportarlos con seguridad, ya que los animales son muy maniobrables y pueden escaparse literalmente de las manos.
#nº 4: Evite el roído peligroso
Si su conejo roe los barrotes de la jaula, el plástico, los cables o las paredes, no sólo es molesto para usted por los daños, sino también peligroso para el animal. Los materiales son demasiado duros para los dientes y pueden causar daños.
Pueden romperse los dientes o producirse heridas en la boca.
También debes asegurarte de que el animal no roa ningún tejido. Si mordisquea una alfombra, unas cortinas o una toalla, las fibras pueden aglomerarse en el estómago y provocar un bloqueo u obstrucción completa de los intestinos.
Además, ayude a su mascota con el aseo para evitar grandes acumulaciones de pelo en el tubo digestivo. El estreñimiento también puede provocar mal aliento en su conejo.