Es probable que a primera vista asocie un pelaje pegajoso en su hámster con suciedad.
Sin embargo, esto puede deberse a diversos factores y a menudo se debe a una enfermedad.
En este artículo, te revelamos 10 causas comunes del pelo pegajoso de los hámsters y también te mostramos qué puedes hacer al respecto y en qué casos es absolutamente necesaria una visita al veterinario.
10 causas del pelo pegajoso de los hámsters
El pelo pegajoso en los hámsters puede tener numerosas causas y puede deberse a cosas como la falta de cuidados, pero también a diversas enfermedades. En cualquier caso,es una señal de alarma, ya que estos animales suelen ser muy limpios.
A continuación le explicamos en detalle las causas y lo que puede hacer al respecto.
Motivo 1: Infestación parasitaria
Una infestación de ácaros o, más raramente, de pulgas puede provocar que la piel se descame y que tu hámster sufra fuertes picores. En casos extremos, el animal puede rascarse con sangre.
Además de la caspa y la sangre, las heces de los parásitos también se adhieren al pelaje.
En algunos lugares, incluso puede haber pérdida de pelo.
Las mordeduras y picaduras de los parásitos suelen ser sólo molestas, pero no peligrosas. Sin embargo, pueden inflamarse, lo que a veces va acompañado de líquido en la herida, secreciones purulentas y costras. Estas sustancias también contribuyen a que el pelaje se pegue.
Tómese en serio los signos y consulte a un veterinario en una fase temprana. Para combatir los parásitos, se utilizan preparados especiales de aplicación localizada. También pueden tratarse las inflamaciones existentes para que cicatricen más rápidamente y su mascota pueda recuperarse.
Debido al picor persistente, así como a las mordeduras y picaduras, el hámster puede debilitarse, su sueño se ve perturbado e incluso es posible la transmisión de enfermedades infecciosas.
Motivo 2: Falta de limpieza por movilidad restringida
Los hámsters son animales extremadamente limpios que pasan mucho tiempo aseándose.
Sin embargo, su mascota puede tener menos movilidad debido a lesiones o restricciones relacionadas con la edad. Como consecuencia, es posible que ya no pueda llegar a todas las zonas con la lengua y las patas. Por tanto, la suciedad y el polvo se acumulan en el pelaje y pueden hacer que se pegue o que tenga un aspecto apagado y desgreñado.
Otra posible causa de esta limitación de movimientos son las lesiones. El roedor puede haber sufrido una distensión, un esguince o un hematoma como consecuencia de una caída o un movimiento desfavorable. Las lesiones internas también son posibles.
Como resultado, el acicalamiento se vuelve doloroso y ya no puede realizarse correctamente.
Preste atención a otros signos, como una postura relajada, pérdida de apetito o letargo(aquí puede averiguar cómo reconocer inmediatamente si su hámster tiene dolor). Es posible que tu hámster ya no soporte bien el peso sobre una pata o que sea sensible al tacto. También pueden aparecer mordeduras y comportamientos agresivos.
En todos estos casos, es aconsejable una visita inmediata al veterinario. Sólo así se podrá averiguar la causa exacta y proporcionar el tratamiento necesario.
Motivo 3: Infecciones o enfermedades del tracto urinario
El pelaje pegajoso junto con el vientre o la zona genital húmedos indican problemas en los riñones o la vejiga.
Esto puede deberse a una infección. Sin embargo, la función renal también puede verse afectada por una alimentación con demasiadas proteínas.
Otra posibilidad es la incontinencia, que se produce, por ejemplo, en la vejez.
El mojado constante con orina hace que el pelaje se pegue y huela desagradablemente a amoniaco. Es esencial que un veterinario lo aclare y, si es necesario, cambie la dieta.
También puede ser necesario un lecho especialmente absorbente y ayuda con el aseo.
Motivo 4: Falta de cuidados
Especialmente para los hámsters con pelaje muy suave y largo, el aseo puede llevar mucho tiempo y ser demasiado para el propio animal. Los restos de comida, la arena (húmeda), las heces y la orina, así como el polvo y otros tipos de suciedad, pueden causar problemas que, a largo plazo, provocan que se pegue, se formen nudos y se afieltre.
Si no se eliminan, pueden formarse inflamaciones y abscesos bajo el pelo enredado, que a su vez contribuyen al pelaje pegajoso.
Motivo 5: Ausencia de utensilios adecuados
Los hámsters utilizan sus patas, garras y saliva para acicalarse el pelaje. También pueden utilizar los dientes para eliminar la suciedad más gruesa.
Los baños de arena son una opción de limpieza muy utilizada. La arena absorbe la humedad y actúa como exfoliante. El pelo suelto, por su parte, puede eliminarse rascando o frotando contra superficies rugosas.
Sin embargo, si no se dispone de arena ni de materiales adecuados, el aseo del pelaje puede resentirse y pueden producirse pegaduras.
Motivo 6: Problemas dentales
Como los hámsters utilizan la saliva y los dientes para acicalarse, las lesiones y otros problemas en esta zona pueden repercutir negativamente en el cuidado del pelaje del animal.
Entre las posibles causas se incluyen
- Inflamación
- Malposiciones
- Adherencias de las bolsas de las mejillas
- Lesiones
- dientes demasiado largos
Si los dientes de las uñas, en continuo crecimiento, no pueden rechinar correctamente, no sólo se dificulta el cepillado o incluso se hace imposible. También se limita la alimentación y la bebida.
Por lo tanto, ¡actuar con rapidez es vital para su hámster!
Motivo 7: Mala higiene de la jaula
Una jaula limpia es una buena base para un hámster con el pelaje bien cuidado. La orina y las fugas de agua, la arena húmeda, los restos de comida pegajosos y las heces no sólo pueden atraer insectos, sino que la suciedad también se acumula inevitablemente en el pelaje.
Debido a la gran cantidad de suciedad, su hámster ya no podrá limpiarse lo suficiente.
Motivo 8: Lecho inadecuado
Un lecho absorbente es crucial para el estado de la jaula y el nivel de higiene posible.
Las virutas de madera normales son adecuadas para una parte de la jaula. Además de piedras y madera, también son adecuados otros sustratos como arena, tierra, papel triturado, flores de algodón y lecho de cáñamo.
Motivo 9: Agua
Algunos hámsters no aceptan en absoluto los biberones o prefieren beber agua de un cuenco.
Sin embargo, si pone un cuenco, su mascota puede meterse en él mientras juega o corre y mojarse. Esto altera las grasas y aceites que se producen de forma natural en la piel y el pelaje.
Lo mismo ocurre con un bebedero que gotea y, por tanto, con la ropa de cama mojada en la casa del hámster.
Motivo 10: Diarrea
La comida en mal estado o incorrecta puede provocar diarrea en los hámsters (o incluso estreñimiento).
Las heces, por lo demás relativamente sólidas y secas, serán de blandas a líquidas y posiblemente muy pegajosas. La limpieza es más difícil para el hámster y, sobre todo en el caso de los animales de pelo largo, requiere mucho tiempo.
Además, el roedor se debilita por la diarrea y el aumento de la pérdida de líquidos y nutrientes que conlleva. Esto deja poca o ninguna energía para la limpieza.
Tratamiento y contramedidas
Sólo un veterinario puede tratar las enfermedades y lesiones.
Vigila de cerca a tu hámster y tómate en serio cualquier cambio de comportamiento o signo de un problema de salud. Sin un diagnóstico y tratamiento precoces, las posibilidades de supervivencia son muy bajas en muchos casos. Esto se debe en parte a su poco peso y en parte a su constitución sensible.
No pierdas tiempo si sospechas que tu hámster está enfermo o lesionado
Como ya has visto, las causas de un pelaje pegajoso pueden ser muy variadas y el autodiagnóstico (sobre todo si eres un propietario inexperto) no siempre es aconsejable.
Es mejor visitar al veterinario una vez de más que una vez de menos
Cómo prevenir el pelo pegajoso de los hámsters
Puedes seguir estos 5 consejos para prevenir el pelo pegajoso de los hámsters.
Consejo 1: Un hámster grande en casa
Desgraciadamente, los hámsters no están educados y utilizan el nido, el baño de arena, la cama y posiblemente el comedero como retrete.
Cuanto más grande sea la casa del hámster, más fácil será mantenerla limpia. Esto se debe a que las heces y la orina se distribuyen por una superficie mayor y la suciedad de este tipo representa una pequeña proporción. Esto reduce el riesgo de pelaje pegajoso.
Además, una jaula grande puede ofrecer mucha más variedad de lechos y sustratos, hay espacio para un baño de arena y su mascota puede crear «rincones de aseo».
Todo ello redundará en su bienestar y, por tanto, en su salud.
Consejo 2: Fomente el cuidado del pelaje
Acostumbre a su hámster al cepillado
Puede utilizar un cepillo suave para eliminar la suciedad y los pegotes. Esto supone un alivio considerable para su mascota, sobre todo en la vejez o en caso de enfermedad o lesión.
Con mucha paciencia y empatía, su ayuda en el aseo no es un factor de estrés, sino que muchos hámsters la perciben y disfrutan como una atención agradable.
Consejo 3: Controles regulares
Revise regularmente tanto la jaula como al hámster.
Desde los dientes hasta la zona del ano, los cambios y posibles problemas se notarán pronto y podrá actuar en consecuencia. Esto aumenta las posibilidades de evitar que aparezcan pelos pegajosos u otros problemas.
Consejo 4: Retire la comida
La fruta y la verdura enriquecen la dieta de tu hámster, pero pueden estropearse rápidamente y provocar diarrea, atraer insectos o volverse blandas y pegajosas y ensuciar el pelaje.
Por tanto, retira rápidamente las sobras y procura no excederte con la comida fresca o húmeda. Si le das bayas, por ejemplo, basta con una.
Consejo 5: Elimine los peligros
Como las lesiones también pueden ser responsables de un pelaje pegajoso y pueden volverse rápidamente muy peligrosas si pasan desapercibidas, debes prevenirlas.
Al elegir una jaula o un hogar para hámsteres, asegúrese de que los barrotes -si los hay- no ofrezcan ninguna posibilidad de escape o atrapamiento.
En cuanto a los juguetes, el equipo para roer y demás mobiliario, es importante que todo sea estable y seguro, que no suponga un riesgo de caída y que no tenga puntas ni bordes afilados.